Hay gente que hace las cosas por el mero placer de hacerlas, que no se preocupa (o al menos eso dice) por cómo caiga lo que hace en el mundo. Desafortunadamente no soy una de esas personas. No me duelen prendas en reconocer que estoy pendiente de la cosa esta del feedback porque, entre vosotrasSigue leyendo «¡Ay, campaneras! #2 Folclórica contra folclórica»